El roce y limpieza: Este proceso se aplica en particular a los condimentos: por ejemplo el tomillo, ajedrea, mejorana. Durante este proceso, el material se separa en varias fracciones y cada una se limpia individualmente en tamices y túneles de aire de tipo zig-zag. Esto nos permite limpiar los materiales hasta los niveles de AIA muy bajos y para eliminar otras impurezas (troncos, trozos de tierra, piedras, vidrio, plástico). El “detector de metales” instalado, permite identificar impurezas ferromagnéticas, no ferromagnéticas y no magnéticas de acero inoxidable.